El esposo de mi hija mayor durante 10 años era un hombre guapo, comprensivo y de 39 años que escuchamos que era coqueto antes del matrimonio. Pero a alguien que nunca me ha faltado el respeto a mí ni a su esposa, ni siquiera lo he visto mirar de reojo a otras mujeres. Dejaba a su esposa en la casa de verano en los veranos y se iba a Estambul los fines de semana. Un viernes, escuché a mi hija pequeña, que también está casada, y a su hermano mayor susurrando en el balcón. Me acerqué al balcón sin hacer ruido. Mi niña, ” La tuya viene esta noche, hermana, ¡no te hará dormir de nuevo!”él estaba diciendo. Su hermana también dijo: “Bueno, al principio estuvo bien, pero ya no se retira, me folla todas las noches, ¡si me escapo porque estoy cansada, me lo pone en la boca!”dijo. Y el pequeño dijo: “¡Ahora vienes con una carga de una semana, estás quemada, hermana! Bueno, el mío es el mejor, uno o dos a la semana, un poco, pero un poco. ¡Debe haber encontrado y follado a alguien de vez en cuando, pero no hago ruido, él es tan cariñoso y amable conmigo que estoy enamorada de él incluso después de todos estos años!Dic.”dijo.

Por la noche vino el novio. Hubo una conversación después de la cena. Como el novio era un gerente importante, tomó su computadora portátil y se retiró a sus habitaciones para trabajar. Así que fui a mi habitación a acostarme. Pero no podía pensar en los temas de los que hablaban mis hijas. ¡Especialmente lo sucio que estaba sujetarlo a la boca! Nunca había hecho algo así hasta que tenía esta edad. Ya me había liberado por completo después de pasar por la menopausia y ni siquiera me había tocado el coño excepto para lavarlo.Mar. Pero ahora no estaba pensando en nada más que en la mierda que pronto comenzaría en mi habitación contigua, estaba tratando de sacarme este pecado de la cabeza.

De repente, una maldad vino a mi mente. Luego traté de arrepentirme e sleep a dormir, pero en mi cerebro mi hija (¡folla todas las noches!) su frase resonó. Había una cama doble en mi habitación y dos camas individuales en su habitación. El nieto dormía en la cama del piso. Inmediatamente me levanté y le grité a mi hija: “¡Si te quedas en mi habitación, estarás más cómoda y tu nieto no dormirá en el piso!”Dije, con énfasis, que estaba pensando solo en mi nieto. Entraron en mi habitación y yo entré en su habitación. Dejé mi puerta abierta, naturalmente cerraron sus puertas.

Aunque estaba acostado, me estaba esponjando la oreja, preguntándome si habría algún maldito sonido. No hubo sonido durante los primeros 10 minutos. El diablo pinchó, sentí curiosidad, me levanté, miré en silencio por el ojo de la cerradura de su puerta. Pero me decepcionó, el novio estaba jugando con su computadora. Justo cuando estaba perdiendo la esperanza y pensando en ir a mi habitación, el novio apagó su computadora y abrazó a mi hija, que estaba leyendo un libro en la cama, por detrás. El novio acariciaba suavemente las largas y torneadas piernas de mi hija, que parecían mi juventud, susurrándole algo al oído. Mi hija también estaba empujando su trasero frente al novio y coqueteando. Por un lado, el novio le chupó el lóbulo de la oreja y le besó el cuello, una mano entró por abajo y agarró su seno izquierdo, y la otra mano estaba acariciando el coño de mi hija. Al principio pensé que lo que estaba haciendo era una vergüenza y un pecado, pero el diablo me empujó, seguí mirando. Yo, que ni siquiera me había masturbado en mi vida, estaba a punto de ver a pørnø en vivo por primera vez.

Continuaron así por un rato, luego el novio se levantó, se quitó la ropa y le dio la espalda a la puerta. Luego puso a mi hija boca abajo y la tiró al suelo, quitándose los pantalones de pijama y las bragas con un chasquido. Sentado sobre el trasero de mi hija, también le quitó la parte superior del pijama con un solo movimiento. Desnudo y boca abajo, extendió las piernas de mi hija y pegó su cabeza decapitada entre sus nalgas. Que hicieran esto muchas veces era obvio por la rapidez con la que mi hija se ponía una almohada debajo de la cintura. Estaba golpeando su trasero ligeramente en una mano, luego lamiéndolo por todas partes y agarrándolo. En un momento, enterró completamente la cabeza, y mi hija también levantó un poco el culo, así que desde este punto de vista, estaba muy claro que le estaba lamiendo el coño y el culo al mismo tiempo y tocándolos a los dos decentemente. incluso cuando tenía 18 años, cuando mi coño era una línea delgada, nunca me habían lamido así una vez, entonces nunca se me había pasado por la cabeza que me pudieran lamer el coño.

Después de un rato, mi hija comenzó a revolotear, enterrando la cabeza en la almohada. Era obvio que si estuvieran en su casa, gritarían. Mi hija dijo: “¡Ya terminé, eso es suficiente!”a pesar de lo que dijo, el novio puso a mi hija de espaldas, la puso en posición de misionera, le agarró el culo con ambas manos, su boca cubrió completamente el coño de mi hija, continuó lamiendo. Luego metió uno o dos dedos en el coño de mi hija a la velocidad del motor y comenzó a lamer una mano. Dos minutos después, mi hija volvió a contraerse como un resorte y se tiró a la cama, ya no se movía. Fue entonces cuando vi la polla del novio. Dejó de lamer, se acostó junto a mi hija y comenzó a besarla tiernamente. Pero mi ojo quedó atrapado en la polla del novio. Su pene no era muy largo, pero tenía el grosor de una muñeca. Hasta ese momento, solo había visto la polla de mi esposo, pero la polla del novio estaba perfecta.

Mi hija abrió los ojos lentamente, esta vez mi hija primero besó el cuello, los senos de su esposo, luego, antes de apartar los ojos de mi yerno, comenzó a besarle las bolas y acariciarle la polla con la mano. Sin embargo, sostuve la polla de mi esposo una vez mientras le enjabonaba la espalda, aparte de eso, mis labios ni siquiera se tocaron. Entonces mi hija hizo algo que me sorprendió, se llevó la polla de su marido a la boca de una vez y permaneció un poco inmóvil. Mi hija maestra de aspecto inocente estaba haciendo cosas que no podía imaginar. Mientras tanto, su mano acariciaba las bolas desde abajo. Dic. Luego, de repente, se agitó y comenzó a chupar. Esta vez fue el turno del novio de intentar no hacer ruido. Después de uno o dos minutos, el novio presionó bien la cabeza de mi hija contra su polla, novó bien sus piernas. Y cuando mi hija se enderezó, me sorprendió que las fertilizaciones fluyeran por el costado de su pequeña boca. Sentí náuseas, pero lo que realmente me sorprendió fue la humedad que sentí en mi coño por primera vez desde la menopausia.

Mi hija se enderezó y metió la mano en su bolso, sacó papel de seda y se limpió la boca y la cara. El novio, por otro lado, estaba esperando en la cama con la polla erguida, acariciando la polla por un lado. Me sorprendió que tu polla no bajara. Las venas de la gruesa polla eran visibles, y una o dos gotas de semen brillaban en la punta. Tuvo relaciones sexuales con mi esposo una o dos veces seguidas, pero en estas también esperamos a que se levantara la polla para comenzar la segunda. Después de que mi hija se limpió la boca y la cara, se subió a la cama como si fuera una vista muy natural y se sentó sobre esa polla gruesa de una vez. En ese momento, pensé en el momento en que esa chica delgada se metió por primera vez en esta polla. Ni siquiera se me había pasado por la cabeza en su boda. Mi hija gradualmente comenzó a mover su cintura. Luego, tomando fuerza de las rodillas del novio, comenzó a sentarse y ponerse de pie. La gruesa raíz de la polla brillaba de las aguas del coño de mi hija.

Después de un rato, mi hija dijo: “¡Estoy cansada!”cuando dijo, el novio la acostó a su lado, levantó una pierna y comenzó a bombearle el coño el Dic. Por un lado, estaba apretando su pecho, tomando los extremos entre sus dedos y tirando. Dic. En ese momento, también noté que mi mano acariciaba mi coño sobre mi camisón. Me subí la falda del camisón hasta las piernas, abrí la ropa interior y toqué suavemente mi coño empapado, que había estado empapado quizás por última vez hace 10 años. Y entonces mi dedo tocó mi punzón, que tenía miedo de tocar incluso cuando me estaba lavando porque era un pecado.

En ese momento, el novio aceleró su entrada al coño de mi hija a fondo, cubrió la boca de mi hija con la mano para que no gritara. “¡Deja que te castigue en Estambul, perra, te follaré dos veces cada noche!”él estaba gimiendo. “¡No me queda agua en el coño!”la humedad de mi hija le llegaba casi hasta las rodillas”, dijo. El novio también se quita por completo la polla y la vuelve a insertar, la imagen de una polla gruesa y mojada también me volvió loco. Enormes bolas se balanceaban y golpeaban el trasero de mi hija. “¡No vengas hacia mí !”con la voz de mi hija diciendo, de repente me metí dos dedos en el coño. El novio sacó su polla y se la entregó entre las manos de mi hija, y la polla que las diminutas manos habían envuelto decentemente brotó nuevamente con algunos roces en la cara de mi hija.

Mientras estaba teniendo quizás el orgasmo más difícil de mi vida, cerré los ojos y me imaginé tratando de sentarme en esa polla gruesa. Cuando fui a mi habitación con la mano empapada, lamentando la idea de haber pecado, lo único que tenía en mente era follarme a mí mismo. Ver a mi yerno follar a mi hija me volvió loco…